Ovidio Roca
“Respeta a tus semejantes y no hagas lo que no quieras para ti. Lo único que te pido es que pongas atención en tu vida, que tu estado de alerta sea tu guía”. Baruch Spinoza.
No son solo las ideas las que dominan el mundo, importan las circunstancias. Estas circunstancias nos condicionan, pero con esfuerzo y sentido común podemos salir de esta trampa y vivir mejor. Hace mucho tiempo decía Ortega y Gasset: “Yo soy yo y mi circunstancia y si no la salvo a ella no me salvo yo”.
Actualmente el científico, Robert Sapolsky lo amplia, y subraya que todo lo que hacemos viene determinado por nuestra biología e historia, genes, hormonas, educación, infancia y las diversas circunstancias de la vida que se extienden incluso mucho más allá de nosotros. Es una cadena interminable de causas, que se remonta a nuestros padres y más allá, crea una red casi infinita de factores que acaban traduciéndose en nuestras acciones.
Sin embargo es importante entender, que este sesgo circunstancial puede y necesita ser combatido y modificado, para que todos vivamos mejor. Eso implica cambio de enfoque y de actores: “Una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre, con los que vienen fracasando desde siempre y que siguen arruinando este país”. Milei.