La historia de la torre de Pisa – 12.3.2024

La torre de Pisa no es el único ni el más inclinado del mundo, pero sí es uno de los monumentos más emblemáticos por esta característica. Miles de turistas se acercan a la ciudad de Pisa en busca de la torre de Pisa para admirar sus características arquitectónicas y tomarse una foto simulando sostener la torre, algo que lo ha convertido en un símbolo italiano. Sin embargo, hay que remontarse a sus orígenes y entender su historia para saber por qué la torre de Pisa está inclinada.
Situada en la ciudad de Pisa, en la región de la Toscana, y más concretamente en la Plaza del Duomo, la torre se comenzó a construir en agosto de 1173 por el arquitecto Bonano Pisano. En esta primera etapa, se construyó la primera planta, que estaba rodeada de 15 columnas. Posteriormente, en 1178 y con la construcción de la tercera planta, se percataron de que la torre había tomado una inclinación de 5 centímetros, debido principalmente al tipo de suelo sobre el que estaba construida. Por este motivo, se cesó su construcción, por el miedo a que se derrumbase.

Tras 100 años en los que la torre de Pisa se mantuvo con tres plantas, Giovanni di Simone reinició los trabajos. Para evitar y compensar la inclinación de este edificio, construyó cuatro pisos más de forma vertical para mantener el equilibrio. Pese a ello, el campanario continuaba inclinándose, esta vez hacia el lado contrario. Por ello, cesaron las obras de nuevo.
Posteriormente, en 1372 tras realizar cálculos y observaciones de la desviación (de 1,63 metros) Tommaso Pisano concluyó la obra de la torre de Pisa, que aún se mantiene en pie más de 600 años después. Lo más curioso es que la inclinación de esta torre disminuyó considerablemente los siglos siguientes, hasta que el arquitecto Alessandro Gherardesca la restauró sustituyendo el suelo de lodo por una base de mármol, lo que hizo que la desviación aumentara considerablemente. de nuevo.
Echando la vista atrás y teniendo en cuenta la historia de su construcción, es fácil pensar que tuvo que ver con algún problema al comienzo de las obras con la idea del arquitecto. Sin embargo, la explicación tiene más que ver con el tipo de suelo sobre el que está construida la torre de Pisa. El lugar sobre el que se asienta es poco estable, además de que el subsuelo es pantanoso, formado por arena y arcilla.
Este problema, unido a la capacidad de este tipo de suelo por deformarse y moverse, y teniendo en cuenta que una parte de la torre está enterrada…¡es imposible que no se ladease! Sólo tenemos que pensar en su peso y altura: la torre de Pisa mide 55 metros de altura y casi alcanza las 15 toneladas. Todos estos factores propiciaron que la torre se fuese alejando del centro con cada año de construcción.
¿Es posible que se caiga la torre de Pisa?.
Lo cierto es que hasta hace algunos años había una gran probabilidad de que la torre de Pisa inclinada, terminase por derrumbarse. Sin embargo, tras prohibir la entrada de turistas en el campanario, se reunió a expertos para asentar y enderezar una de las torres más famosas de Italia. Gracias a ello, actualmente tiene una inclinación similar a la que tenía hace dos o tres siglos. Según los expertos, esto permitiría que la torre de Pisa se mantuviera erguida durante otros 300 años más. Gracias a las nuevas tecnologías, sería posible incluso enderezarla por completo. El problema es que, de cara al turismo, no interesa para nada: si se enderezase por completo, la torre de Pisa perdería todo su encanto.

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